Debutar de
pronto en el arbitraje, poco tiempo después de haber aprobado el curso, tuvo
factores positivos y negativos. Por un lado, debido a los deberes de la universidad
no tuve tiempo de repasar y seguir aprendiendo acerca de la mecánica de
arbitraje y las Reglas del Básquetbol,
sin embargo, los conocimientos que logré adquirir durante el curso aún estaban
en la memoria, y aquellos fueron de gran ayuda durante cada partido.
Me sorprendió bastante que Patricio Menares durante
el torneo recién pasado me asignara 10 partidos, entre los cuales se
encontraron la final de categoría Mini e Infantil.
Lo anterior demuestra que el CD ABS tiene un enfoque muy práctico (aprender haciendo) y confía en sus aspirantes,
lo que es muy positivo porque luego de esta experiencia, evidenciado el hecho
de que no hay mejor manera para formarse en el arbitraje, que aplicar la teoría
en la práctica mediante el trabajo en conjunto con un compañero experimentado.
La principal impresión que me dejó esta experiencia fue
el impactante proceso de adaptación por el cual tuve que pasar. En los primeros
partidos, sentí mucha inseguridad con respecto a la toma de decisiones (cobros, violaciones,
etc.) debido a que en mi casa de estudios por problemas de tiempo el CD ABS tuvo que realizar el curso en la mitad del período que generalmente utiliza,
por lo cual, hubo mucha información que no logré asimilar.
Otra variable que
percibí que me jugó muy en contra, es el hecho que durante mi vida nunca he
estado relacionado con el Básquetbol, ni con deportes colectivos (siempre he
practicado deportes individuales) por lo tanto, soy una persona muy
individualista y no acostumbro a trabajar en equipo.
A medida que arbitré varios partidos comencé a sentir mayor seguridad y tranquilidad a la hora de
tomar decisiones, progresivamente me atreví a cobrar más faltas y violaciones,
mejoré mi apariencia en la cancha y observé más veces a mi compañero, entre
otras.
También es importante señalar que cada compañero que tuve (fueron muchos
en sólo diez partidos), me enseñó algo nuevo y en momentos difíciles siempre
tuvo la disposición de ayudar, sin ellos no habría podido mejorar tan
rápidamente.
En resumen, siento que gracias al esfuerzo que puse
en cada partido y a la ayuda de mis compañeros aprendí demasiado, sin embargo, sé
que aún me falta mucho, y por eso en los
próximos partidos pondré mucho empeño en
mejorar cada detalle, principalmente aquellos observados.
Me encantó este
trabajo y quiero ser un buen árbitro en el futuro.
ALEX VERDUGO
ASPIRANTE ÁRBITRO CD ABS
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